Imagina que pasaría sí, en vez de usar complejas bases de datos o paneles informativos, fuera posible monitorear los datos en tiempo real de un edificio, instalación o planta industrial, sobre el modelo BIM 3D. Cuando se añade la dimensión 3D, se descubren nuevas correlaciones entre elementos, nunca antes vinculados. Entendiendo mejor, de este modo, cómo el funcionamiento de un equipo particular, está afectado al resto de componentes dentro de la misma red. Tener esta visión global de los componentes, puede significar una verdadera ventaja competitiva. Y todo ello, sin cambiar los procedimientos diarios de trabajo o usar complicados softwares.