En un modelo de rápido crecimiento, las empresas recorren primero la ruta del volumen. El desafío es que la mayoría de las empresas no tienen suficientes recursos para continuar financiando esa inversión en el crecimiento durante un tiempo prolongado. Por lo tanto el foco principal se convierte en velocidad. Pero la velocidad sin control podría traer riesgos. Se hace necesario que sean ágiles e implementen una metodología común a lo largo del proceso del cliente para continuar escalando. Para hacerlo, debemos confiar en una ciencia que se aplique a las diferentes partes del negocio, desde Marketing, Ventas, Incorporación y Éxito del Cliente, con un enfoque muy centrado en el Cliente. Más de 300 compañías en Silicon Valley y en todo el mundo han aplicado el método de ventas SaaS para acelerar sus negocios.